Formas de balancear alimentos para comer sano sin dejar uno que otro antojo
Sufrir un antojo es algo absolutamente común, nos sucede a todos y casi todos los días. Usualmente tiene que ver con deseos de alimentos altos en grasa o en azúcar, esto se debe a que provocan una inmediata satisfacción. A veces se trata de una costumbre como desayunar algo fijo, otros están motivados por razones emocionales para lidiar con el dolor o la ansiedad.
Sean cuales sean los motivos, como se trata de un mecanismo muy parecido a una adicción, cada vez requiere una mayor cantidad para sentir esa satisfacción. Sin embargo, poco a poco, con elecciones más inteligentes se puede ir contrarrestando poco a poco esas necesidades. Y tampoco se trata de sufrir, las opciones también son deliciosas.
Chocolate
El chocolate que nos daban de niños en realidad no era chocolate, pues la manteca de cacao se mezcla con leche, lo cual incrementa el contenido de grasas y de calorías vacías. En la actualidad ya no es difícil encontrar chocolate de verdad, el cual puedes distinguir por el porcentaje de cacao que indica la envoltura. Los puedes hallar con porcentajes de 50 a 90. Si al principio te cuesta disfrutar el sabor natural, puedes ir subiendo poco el porcentaje.
Fruta
La fruta fresca es una excelente opción por las mañanas. Las frutas más recomendables son las bayas rojas: fresas, zarzamoras, arándanos, etc. por su bajo contenido de calorías y sus elevadas cantidades de vitaminas. Las puedes mezclar con helado o con leche descremada para un smoothie o comer con un puñado de granola.
Los llamados frutos secos como son las nueces, almendras, avellanas en porciones pequeñas son opciones que traen tanto la presencia de grasas buenas como un toque salado para cualquier hora del día.
Yogur
El yogur natural, especialmente, el etiquetado como griego, es una excelente opción para saciar el antojo de un helado. Lo puedes dejar enfriar en el congelador un rato para agregar la sensación de frío a su ya espesa consistencia. Eso sí, lee con cuidado los ingredientes en la etiqueta porque algunos que se dicen “naturales”, pero traen azúcares agregados.
Crema de cacahuate
La también llamada mantequilla de maní es un producto que por su consistencia y sabor es una excelente opción para los antojos de mermeladas, cremas de avellanas y otras preparaciones con altísimos contenidos de azúcar. La crema de cacahuate posee cualidades energéticas y tiene un porcentaje de grasa; pero se mantiene en el rango de lo saludable. Para variar su sabor se puede endulzar con canela en polvo, un toque de esencia de vainilla o unas virutas de coco. Puedes consumirla untada en galletas de arroz cuyo contenido calórico es bajo.
Tostadas horneadas y palomitas
Las papitas y demás frituras son otro de los puntos débiles de los antojos. Las opciones saludables están al alcance de tu mano con las tostadas horneadas a las que puedes agregar un poco de aguacate. Pero si necesitas algo más crujiente, preparar palomitas en casa con un puñado de granos, una cuchara de aceite y muy poca sal es lo tuyo. Además, escuchar como van reventando será música para tus oídos.
Como ves, no se trata de eliminar los antojos y dedicarte a beber sólo agua cuando te asalte alguno, se trata de buscar opciones que te proporcionen satisfacción; pero a la vez elementos nutritivos para que logres un balance en tu vida diaria.
Junio 22, 2021
Balance 24