Combate la depresión de invierno
Sentirte sin ganas de hacer nada, pensando que lo único que quieres es quedarte en cama o sentado con una bebida caliente y una cobija en tus piernas pueden ser manifestaciones de la llamada depresión de invierno.
¿Qué la depresión de invierno?
La depresión de invierno, o Winter Blues en inglés, es la tristeza, la baja en el ánimo o mal humos que se experimenta cuando avanza el otoño y durante los meses de invierno. Clínicamente hay casos severos de este padecimiento que se denomina Seasonal Affective Disorder.
Este padecimiento es más común entre más cerca se está de los polos, es decir, en las zonas donde los periodos de luz solar son muy cortos y los de oscuridad se alargan por más horas. Sin embargo, en otras latitudes aunque no sea tan drástico el cambio es lo suficiente para que los ciclos circadianos, es decir, los que regulan nuestro reloj interior y que se rigen en gran medida por nuestra exposición a la luminosidad también pueden verse alterados.
Existen también factores sociales y emocionales que pueden contribuir a esta baja en el estado del ánimo. Los días de diciembre están llenos de celebraciones que apelan a la alegría, el amor, la paz y la familia, por lo que si una persona ha tenido pérdidas de personas cercanas, si no está en una buena situación en el trabajo o en la escuela o en la familia, se siente fuera de lugar, sin conexión y sin oportunidad de expresar su verdadero estado de ánimo. Algunos podrán aislarse, pero otros se sentirán forzados a fingir que están bien y esto agrava la sensación de vacío y desconexión.
Algunas recomendaciones
Cabe señalar que las siguientes recomendaciones son para los casos leves o pueden ser acciones preventivas, pero si los síntomas de desconexión, tristeza, desesperanza y falta grave de ánimo siguen durante dos semanas se debe acudir a un especialista de la salud para revisar el caso.
Una vez dicho lo anterior, si estás en ese estado de bajo ánimo es importante para combatirlo que consideres:
Exponerte a la luz: La luz es clave para estimularnos también porque activa la vitamina D; pero también procura que tu lugar de trabajo y tu casa reciban la mayor cantidad de luz solar abriendo cortinas o persianas desde temprano; y prende las luces especialmente las de luz amarilla para complementar.
Procurar salir a pasear: Abrígate bien, usa calzado cómodo y sal a dar una vuelta sin celular. Siente la brisa (incluso fría puede ser disfrutable), fíjate en cómo han cambiado los árboles y las plantas, descubre cómo se ve el cielo y busca disfrutar de la naturaleza. Así te estarás exponiendo a la luz incluso si no está el sol en todo su esplendor.
Comer adecuadamente: Es necesario mantener una dieta saludable, controlando la ingesta de azúcares y harinas, procurando incorporar verduras y frutas ricas en vitaminas como la C (los cítricos incluso son las frutas de temporada, aprovecha). No se debe olvidar la hidratación adecuada a lo largo del día.
Ejercitarte: Tener rutinas de ejercicio estimula la producción de endorfinas, serotonina y domina que son las llamadas hormonas del bienestar. Eso ayuda a mantener un balance positivo de por sí, y además, si te costó más trabajo dejar la cama para ejercitarte, te sentirás más satisfecho y eso alimenta el círculo virtuoso de la autoestima, y te será más fácil hacerlo al día siguiente.
Enero 10, 2024
Balance 24