El teletrabajo, que es la forma correcta en español de llamar al home office, fue una de las sorpresas que la pandemia de COVID-19 trajo a nuestras vidas; aunque ya se consideraba una de las tendencias para esta década puesto que la tecnología ya estaba en el punto de poder realizar cierto tipo de trabajo desde cualquier rincón del planeta que tenga una conexión a la red.

Sin embargo, el brusco cambio, así como la cancelación de opciones de entrenamiento en gimnasios, han supuesto un reto interesante para mantener el nivel de actividad física que se tenía antes. El teletrabajo ha llegado para quedarse, ya sea conviviendo con el presencial, o por temporadas, por eso no puedes posponer el encontrar la forma de entrenar, aunque estés en casa.

Rutinas a tu favor

No se trata de una tarea imposible entrenar mientras estás teletrabajando, sólo requiere reorganizar nuestras actividades tanto en el espacio físico como en la creación de nuevas rutinas para lograrlo. La palabra rutina suele ser vista con cierto desprecio pues se le percibe como algo negativo, que reduce nuestras opciones y que trae aburrimiento a nuestras vidas. Pero la rutina, es decir, el destinar un tiempo y un espacio fijo a cada actividad también es nuestra mejor aliada cuando se trata lograr hábitos que perduren a lo largo del tiempo.

Por escrito

Toma una hoja o haz un Excel para escribir un horario que incluya todas las actividades de tu vida. Marca las horas que dedicarás a tu entrenamiento físico. Toma en cuenta que la actividad intensa es mejor hacerla en la mañana porque en la noche la sobrexcitación puede dificultar que concilies el sueño, y viceversa, si prefieres un entrenamiento como el yoga que conlleva relajación, puedes considerar programarlo más tarde. Ver el panorama completo del día o semana permite crear rutinas más realistas.

Las redes también son aliadas

Especialmente en Instagram y en algunos canales de YouTube puedes encontrar entrenadores que dan clases en horarios fijos. Muchos de ellos ofrecen una clase gratuita a la semana que te puede servir para probar si es la opción adecuada para ti. Si te inscribes formalmente puede ser que saber que pagaste te motive a aprovecharlas y no desperdiciar lo que invertiste. 

No compres equipo caro

Para sustituir la experiencia del gimnasio, hay quienes se lanzaron a comprar enormes caminadoras o elípticas pensando que eso les ayudará a entrenar y luego descubrieron que ni cuenta con el espacio suficiente o que la experiencia en casa solo no es la misma. Analiza bien lo que vas a adquirir antes de tomar una decisión y piensa antes si lo puedes sustituir con lo que hay a tu alrededor, quizá sí puedes salir a correr en los alrededores de tu vivienda y no necesitas una caminadora; o unas buenas ligas son la opción en lugar de una enorme máquina de remo. 

Empezar y mantener

Una vez que tengas el panorama claro de cómo incorporar el ejercicio a tu vida en casa, incluyendo el teletrabajo, no olvides que debes ser estricto contigo mismo y apegarte a lo que has decidido hacer. La ventaja de la actividad física continuada es que comienzas a ver resultados pronto si estás comprometido. Con sólo lograr mejorar un 10%, empezarás a ver la diferencia en tu cuerpo y te será más fácil perseverar. No esperes más para dar el primer paso.

Fuente:

https://www.menshealth.com/es/fitness/a34844114/como-no-dejar-de-entrenar-teletrabajo/