Obesidad en México
Hay récords que es preferible no tener como es el caso de la obesidad y el sobrepeso. Tristemente, en México tenemos una de las tasas de obesidad más altas en el mundo ya que 3 de cada 4 adultos tiene sobrepeso y obesidad, el 34 de ellos, además ya ha llegado la etapa mórbida, es decir, el mayor grado de esta enfermedad. Para hacer todavía peor este panorama, resulta que estos números tan altos comienzan desde la infancia, pues el 35 por ciento de los menores en edad escolar y el 38 por ciento de los adolescentes ya tienen obesidad crónica.
Una enfermedad que desencadena otras
En la obesidad, que algunos han propuesto llamar “adiposidad” para entenderla mejor, el tejido graso aumenta de tal modo que ocasiona una inflamación general que afecta a todos los órganos del cuerpo. Con el paso del tiempo, esa inflamación puede provocar daños como mal funcionamiento del páncreas (estado prediabético o diabetes); favorecer el hígado graso y sí como reflujo gastroesofágico; asma severa; alteraciones ortopédicas, daño en los riñones y apnea del sueño, la cual consiste en roncar mucho y dejar de respirar brevemente.
En el caso de las mujeres además se suma que la obesidad y el sobrepeso facilitan el síndrome de ovario poliquístico en las mujeres. Este padecimiento es una desregulación hormonal que compromete la fertilidad, además de generar otras muchas molestias. En las niñas, el exceso de grasa puede adelantar las liberación de hormonas sexuales provocando una pubertad precoz.
Conocer esta capacidad destructiva de la obesidad y el sobrepeso es vital para entender porque es fundamental combatirla; pero sobre todo, prevenirla porque revertirla como casi todos sabemos implica mucho más esfuerzo, tiempo e, incluso, dinero que evitar llegar a esa situación. Además, aunque nunca es tarde para regresar al camino a la salud, entre más se ha uno alejado del él, más difícil es reencontrarlo.
Pero sí hay buenas noticias
Es claro que llegar a tener tan altas tasas de obesidad en el país comenzó varias generaciones atrás, lo cual nos deja con un doble reto. Por una parte, necesitamos desde ya evitar que la obesidad infantil siga creciendo, pues eso nos ayudará a que los números bajen a la larga; por la otra, debemos impulsar la consciencia sobre la gravedad de la obesidad y el sobrepeso, además de impulsar acciones positivas que motiven a todos a tomar en serio este tema.
En el caso de los pequeños, la situación es especialmente prometedora, pues el 95 por ciento de los casos de obesidad infantil se deben a dietas con alto valor calórico y escasa actividad física; por lo que cambiando los hábitos de alimentación actuales hacia opciones más saludables y promoviendo el deporte y la actividad física se pueden lograr cambios.
Las familias se pueden beneficiar de esos cambios necesarios con los niños y los adolescentes, pues será más fácil implementarlos si son parte de la dinámica cotidiana. Incluso, aunque actualmente no se esté enfrentando un caso de obesidad en la familia, buscar un estilo de vida más saludable y menos sedentario es siempre un buen camino para vivir más plenamente.
Fuentes:
https://www.gaceta.unam.mx/obesidad-epidemia-agudizada-en-mexico/
https://www.unicef.org/mexico/sobrepeso-y-obesidad-en-ni%C3%B1os-ni%C3%B1as-y-adolescentes
Octubre 28, 2022
Balance 24